Ne me quitte pas, Jacques Brel

lunes, 15 de octubre de 2018

MÚSICA CLÁSICA CON UNA SONRISA..



Estas semanas atrás hemos hablado de música recordando a Charles Aznavour y Montserrat Caballé, pero lo hemos hecho con un regusto amargo, cuando menos agridulce, puesto que estas dos grandes figuras de la música en sus diferentes estilos nos han dejado, pero nos queda su inmenso legado musical. 

* Podéis clicar el enlace sobre las imágenes.

          
     
La idea de hablaros sobre la música clásica con una sonrisa es debido a una conferencia a la que asistí sobre Historia de la Música Clásica, con el tema de el "Humor en la música clásica" así que espero que al conferenciante no le moleste que hoy recuerde la música clásica desde una vertiente más alegre y divertida. O es que la música tiene inevitablemente que elevar al oyente hasta lo sublime, acaso tiene que ser siempre profundamente seria y apasionadamente lírica. 

El hecho de que la música, la buena música, puede crear ciertos prejuicios que tiendan a considerar este tipo de música como aburrida o tediosa.  La música "clásica" o mejor dicho culta, también puede hacer humor y provocar unas sonrisas cuando se está interpretando, aquí tenemos un buen ejemplo de ello en este vídeo de la Sinfonía de los Adioses, la curiosa reivindicación laboral de Joseph Haydn, y un placer para los sentidos.


La historia de la obra:  Joseph Haydn era el músico de la corte del príncipe Esterházy. Cuando murió, su hermano, el príncipe Nikolaus, mantuvo a la orquesta a su servicio. A este nuevo príncipe le gustaba residir largas temporadas en su palacete de Eszterháza (Hungría).  Los músicos no podían desplazarse allí con sus familiares, donde tenían que permanecer largas temporadas separados de sus seres queridos.
Cansados de esta situación, pidieron a Haydn que intercediera por ellos ante el príncipe. A Haydn se le ocurrió una ingeniosa manera de protesta, componer una sinfonía. El maestro ideó una manera muy diferente de terminar la pieza musical, no terminarla de a la vez como es costumbre, si no terminar la sinfonía  poco a poco.
Así que, ya frente al príncipe, cada músico, tras finalizar su parte,  silenciosamente y con sumo respeto, recogió su partitura, apagaria la vela de su atril, se levantaría de su asiento y abandonó la sala.

El príncipe y toda la audiencia quedaron impactados por este insólito final, y, entendiendo el mensaje, según cuenta la anécdota, el príncipe se levantó y dijo: “Bien, ya que todos se marchan, nosotros nos iremos también”. Al día siguiente regresaron a la capital austriaca, la corte volvió a Viena.

Por ello la Sinfonía nº 45 en fa sostenido menor o Sinfonía de los Adioses, es una curiosa reivindicación laboral realizada a través de la música, que tuvo un final feliz para los protagonistas, y se convirtió en historia.

Aquí os dejo el video  magistralmente dirigido por Daniel Barenboim. 

Al que le guste la música seguro que tendrá tiempo de escuchar los 8 minutos largos que dura, en cualquier caso, los que vais justos de tiempo no os perdáis el final a partir del minuto 4,18.







8 comentarios:

  1. Hola m.ha encantat l.entra d,avui. A m m.encanta la musica classica tinc molts CD classics.
    Gracies per la teva visita.
    Petons

    ResponderEliminar
  2. Unas minutas deliciosas con historia y musica....

    ResponderEliminar
  3. Hola Llorenç, no me canso de oír música, es mi compañera habitual en todas mis actividades y estado de ánimo. ¿ocho minutos? es a joya musucal dura, voy a por otra, jeeeeeeeeeeeeeeeee...

    Gracias por tu dedicación, es genial.

    Abrazetes.

    ResponderEliminar
  4. La musica ha il potere di farci provare intense emozioni, qualsiasi essa sia....
    Buona serata e un sorriso, Lorenzo,silvia

    ResponderEliminar
  5. Con esta belleza de ópera ten por seguro que hoy me echo la siesta. Y encima lloviendo mejor aún.

    Que bueno, jajaja😂 🤣🤣

    Buena merienda y feliz tarde de risa.
    Un abrazo Llorenç

    ResponderEliminar
  6. A mí me gusta toda la música, bueno menos las sevillanas y el reguetón, que me pasa como con los churros que más de uno me empacho.

    Ay, Llorenç, que buena esta anécdota de Haydn, no la conocía, y tampoco la pieza, así que ha sido un disfrute doble y tambien el vídeo, creo que es en el Concierto de Viena de año nuevo, siempre que puedo lo veo en directo, nada mejor que empezar el año con música, baile y alguna sonrisa.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  7. Qué interesante es aprender contigo. Me ha gustado mucho.

    Muchos besos.

    ResponderEliminar

Gracias por vuestros comentarios...

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...